El
 decaimiento del poder militar se está acrecentado no solamente por los 
recortes del presupuesto del Imperio sino también por las armas de baja 
calidad y por el envejecimiento
 de equipo.
 
No
 solamente se tiene el ejemplo del F-35 que ha pasado su límite de 100 
millones de dólares por unidad e incontables fallas, ahora surge otro 
caso en el último submarino
 clase Virgina USS Minnesota que fue incorporado a la US Navy en 2013 a 
un costo de 2,700 millones de dólares, y en recientes inspecciones a 
casi 1 año después de su entrega se encontraron múltiples defectos que 
lo hacen inoperable y un grave peligro para la
 tripulación si la nave entra en batalla, por ejemplo un tubo con valor 
de 10,000 dólares en apariencia se ajusta a las necesidades pero en 
investigación exhaustiva no es operativo, 2 submarinos de la misma clase
 el John Warner y North Dakota tienen los mismos
 defectos e incluso ya el Ministerio de Justicia ha abierto una 
investigación contra General Dynamics el constructor, otros 30 
submarinos de esa clase deberán ser construidos  se desconoce si el plan
 se llegue a concretar ante la limitación de presupuesto y
 otros proyectos más costosos como el SSBN X reemplazo de los Ohio
 
La
 deficiencia en los contratos se da ya que los contratistas quieren 
seguir ganando mas dinero a pesar de las reducciones en los contratos.