La
caída de los precios internacionales del petróleo parece que van a
acelerar la caída económica de esa economía moribunda, una cosa que
agrava la situación es los bonos en dólares que fueron emitidos poco
antes de la muerte de Chavez tanto por el Secretario de Finanzas y de
PDVSA (Petróleos de Venezuela), el precio del barril se ubica en 76.73
dólares por barril y sigue en picada, acumulando 22 dólares de caída en
tan solo 4 meses.
Por
cada dólar que baje el barril el país deja de ganar 770 millones de
dólares, se espera que tal vez soliciten un préstamo por 14,000 millones
de dólares.
Incluso
las declaraciones que el gobierno va a aumentar su gasto el próximo año
en 34% comentando que es algo racional y prudente no explican de donde
sacaran el dinero, y declarando que esperan cifras irracionales como
inflación de 25 a 30% cuando no baja del 50%
El
gobierno sigue sin tener un plan para recuperar la producción de su
único bien de exportación que es el petróleo, los planes que le llamaron
“Plan de siembra” no rindieron los frutos ni aun con pozos marginales y
no se logró aumentar la capacidad de Gas, mientras el consumo de
gasolina y derivados del petróleo siguió en aumento, lo peor que la
capacidad de refinación sigue estancada y afectada por una explosión en
la refinería de Paraguana que aún no ha sido restaurada a más de 1 años
de ocurrido…
PDVSA apenas en septiembre anuncia de invertirá 20,000 millones de dólares para incrementar en 20% su capacidad de refinación
El
dólar sigue cotizándose en niveles irreales algo que paso en México en
1994 pero a diferencia que no existía un mercado negro ni escasez de
productos básicos, si el gobierno sigue manteniendo sus tipos de cambio
la caída será más pronunciada y perjudicial, si se abre el mercado al
estilo neoliberal será mucho peor ya que no hay industrias, ni personal
calificado, y las leyes laborales vigentes no favorecen a las empresas
es una encrucijada