El
Pentágono sabe a quién culpar al termina de construir un centro de
comando y control en Afganistán que nadie va a usar y tal vez vaya a ser
demolido, llamado campo Leatherneck.
El
edificio comenzó a ser construido en 2010 debido a la alta necesidad de
tener un centro de comando que pudiera albergar a 1500 soldados para
coordinar las operaciones de combate, y para diciembre 2013 el
edificio ya seguir construcción, cuando la necesidad ya se había
perdido, pero un General decidió continuar hasta termina ya que los
fondos ya estaban aprobados.
Este instalación de 24,000 hectáreas fue entregado al gobierno de Kabul el cual a abril pasado sigue vacío.