Los militares advirtieron que sería una misión suicida la contraofensiva de Kherson , pero Zelenski busca una victoria a toda costa, y el primer intento de la contraofensiva acabó en un fracaso horrible.
Según el Ministerio de Defensa ruso, solo en el frente de Nikoláyev-Krivói Rog fueron eliminados 1.200 soldados ucranianos, 48 tanques, 46 vehículos de combate de infantería, 37 vehículos blindados de otros tipos y 8 camionetas.
Hago notar una vez más que los altos mandos militares ucranianos sabían que este sería el resultado de una contraofensiva en el sur del país, pero el comandante en jefe Zelenski busca algo que mostrar a Occidente y demostrar que las armas enviadas no fueron en vano, aunque esto cueste innecesariamente miles de vidas de sus soldados.