Fotos del amartizaje de la sonda PHOENIX pueden indicar la presencia de gotas de lluvia a pesar de las bajas temperaturas de la superficie, la presencia de percloratos pueden mantener el agua en estado liquido llegando a mantener el agua a menos 72 grados centígrados.
Esto podría explicar la filtración de agua que fue detectada comparando dos fotos de la MGS, este perclorato permitiría que también hubiera movimiento subterráneo de los grandes depósitos de agua que hay en el planeta. La NASA explica que tomando en cuenta esto se puede explicar la aparición de ciertas protuberancias que aparecían en las patas de la sonda Phoenix y entonces se pueden atribuir a pequeñas gotas de agua con perclorato.
Dependiendo de la concentración del elemento puede formar bolsas de agua y propiciar la existencia de vida.
Durante los meses que duró la misión el laboratorio espacial confirmó la presencia de hielo de agua cerca del polo norte, rastros de reacciones químicas entre minerales del suelo marciano y agua líquida en el pasado y detectó nieve en la atmósfera.