Luego de las bravuconerías de Estados Unidos y posible embargo unilateral, el parlamento Iraní ha decidido estudiar el cierre de sus aguas territoriales a barcos de guerra, esto sumado a la interrupción de las maniobras navales de Irán durante el transito del portaaviones USS John C Stenis
A pesar de que Estados Unidos posee una gran fuerza naval no significa que sean invencibles, y el Estrecho de Ormuz y el Golfo Pérsico pueden aumentar la vulnerabilidad de sus flotas.
Irán al igual que Rusia durante años de agresiones y amenazas imperiales, ha estado desarrollando y comprando armamento para defenderse en el Mar, incluso sus pequeños botes patrullas pueden significar un peligro para sus avanzados barcos, haciéndolos muy difícil de detectar y estos botes lanzando lluvias de misiles como QADAR.
Las armas de defensa de las Flotas del Imperio esta diseñadas para combatir en grandes espacios abierto como el Océano Pacifico e Indico, en espacio más reducidos su efectividad se ve reducida.
Durante sus ejercicios navales de diciembre 2011, Irán utilizo todo tipo de defensas de las que disponen, el Pentágono teme más de las baterías móviles de misiles anti buque, durante las maniobras Millenniun Challenge 2002 que ponía como Estado rebelde como Irán el Pentágono tuvo graves perdidas en su flota, estas maniobras fueron realizadas poco antes de la destrucción de Irak y tenían como objetivo atacar Irán.
El resultado de este ejercicio fue: “Irán reaccionaría a la agresión estadounidense lanzando una descarga masiva de misiles que aplastaría a EEUU y destruiría dieciséis de sus buques: un portaviones, diez cruceros y cinco barcos-anfibio. Se estimó que de haber sucedido así en el contexto de un escenario de guerra real, en el primer día del ataque podrían haber muerto 20.000 soldados estadounidenses”.