El
Departamento de Defensa ha decidido que en los próximos 3 meses
ampliara los contratos para desarrollar su nuevo Bombardero de Ataque de
Gran Alcance ('Long-Range Strike Bomber', LSR-B) del cual se deberán
construir entre 80 y 100 unidades, el proyecto, dado la envergadura del
proyecto Boeing y Lockheed Martin están trabajando juntos.
Esta
nave deberá reemplazar en especial a los B-52 Stratofortress que ya
tienen 50 años en servicio y hay 76 de ellos en la US Air Force, los
otros bombarderos en servicio son el B-1B Lancer y los B-2 Spirit.
El B-52 y el B-1 deberán estar en servicio máximo hasta el año 2040.
Se
estima que el LSR-B deberá tener un costo de 550 millones por unidad,
aunque grupos como la Federación de Científicos Estadounidenses (FAS en
Ingles) que el costo podría aumentar hasta 810 millones de dólares,
y puede ocurrir lo mismo que con el proyecto F-35 que ya se ha
duplicado y la nave ni siquiera ha entrado en servicio.