Desde que Arabia Saudita fue comprando poco a poco la empresa Petrolera Aramco de las manos de sus socios de Estados Unidos en 1980, el secretismo sobre las verdaderas reservas del campo Ghawar siguen haciendo sospecha al mundo, y que parece que Arabia ante la caída del precio prefiere vender todo lo que pueda, ante el desastre de colapsar el mercado.
La
conspiración se aviva con la estrategia Árabe de 1998 y 2008 de reducir
la producción para volver a elevar los precios del barril.
Solamente
le quedan 10 años de dominio de la producción a la OPEP de ahí en
adelante la producción no aumentara, tal vez Irán salga al rescate
derivado de la nueva apertura
pero como no es miembro de la OPEP hablamos de otras cosas.