Los vampiros que chupan los energéticos de los ductos de PEMEX causaron un desfalco solo en 2010 por $20,000 millones de pesos totalizando 1.7 millones de barriles, pero PEMEX indica que el robo ya se redujo con respecto a 2009 cuando el robo alcanzo un pico de 3 millones de barriles. Durante 2010 las autoridades desarticularon tres bandas de 'vampiros' y confiscaron unos 2.500 millones de pesos (unos 200 millones de dólares).
Las tomas clandestinas mediante las cuales se roban el combustible se concentran en seis estados; Veracruz, Sinaloa, Estado de México, Nuevo León, Puebla y Tamaulipas.
El 1 de enero se sufrió una explosión que devasto San Martin Texmelucan en el estado de Puebla