A partir del año 2013 el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ya no
tendrá más recursos financieros para poder pagar las pensiones de sus
trabajadores jubilados.
Un dato muy curioso es el siguiente:
“De 1969 a 2010, se gastaron en pensiones 471 mil 142 millones de
pesos, pero sólo 9 por ciento se cubrió con aportaciones de los trabajadores,
22 por ciento lo puso el IMSS-Asegurador y el 69 por ciento restante por el
IMSS patrón y el fondo laboral”.