Rusia
sigue mirando atento el resultado final del Fascismo en Ucrania,
esperando a tomar una acción decisiva, pero al momento ha sido muy
suave, las opciones Rusas son cooperar, sabotear o mirar desde la
barrera.
Cooperar
esto es la opción menos probable ya que sería seguir dando privilegios
como gas barato, compra de deudas, etc, incluso la Unión Europea pide a
Rusia participar en el rescate financiero ucraniano, o tener como
comentan analistas un acuerdo de comercio tripartita Kiev, Moscú y
Bruselas.
Una cooperación así para el Camarada Putin equivaldría a admitir una derrota en el más codiciado joya del espacio ex soviético
La
situación en realidad es grave para ambos bandos ya que la ultra
derecha no representa gran confianza a que se cumplan los mandatos del
FMI y la UE, y el partido de Timoshenko también representa corrupción.
Sabotear: riesgo demasiado alto
Tirar
el gobierno fascistas, algo que Moscú puede hacer pero que tendría el
precio de posibles represalias de Estados Unidos y la UE.
Otra
opción la invasión a la parte de Crimea con mayoría de Rusos, pero se
arriesga al caso de que exacerba el sentimiento anti ruso de los
fascista y sumar a la población que no es de esa ideología, y acercaría
aún más a esa población a una posible unión rápida a la OTAN.
E
incluso si Crimea decide unilateralmente y con el apoyo de su población
unirse a Rusia y la violencia estalla por Fascistas que se opone Moscú
debe invadir y proteger a su gente.
Rusia
ya ha empezado a detener las ayudas prometidas al gobierno de
Yakunovich donde se comprometía a comprar 15,000 millones de dólares en
eurobonos de deuda y tan solo compro 3,000, esto hasta que Kiev tenga
una gobierno estable, otra presión puede ser el detener todos los
productos ucranianos que van a Rusia, siendo este el destinatario del
30% de sus exportaciones.
Mirar desde la barrera: Nivel Medio
Lo
que está haciendo actualmente, y que le puede rendir un poco más,
debido a la frágil estructura económica que representa Ucrania, la UE
podría pedir el apoyo Ruso, y este buscar concesiones que beneficien a
los Rusos.
El
estar mirando desde afuera puede hacer que las cosas se encaminen a la
esfera Rusa en especial con la parte Crimea, movilizando a toda esa
población y quebrando de facto con Kiev, y Moscú con los brazos abierto
listo para recibir esa provincia regalada en los años 50s con todo y
población, a un gobierno ingrato que se independizo de la URSS en 1991.